Brno es una ciudad situada a 200 kilómetros de Praga la cual conserva interesantes elementos artísticos, entre ellos
la Villa Tugendhat (siglo XX), que figura en la lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO. Culta y universitaria, además de ser un territorio lleno de arte impulsado por familias nobiliarias.
Cómo moverse
Para llegar a
Brno puedes hacerlo aterrizando primero en el
aeropuerto internacional de Brno-Turany, que es uno de los más importantes de República Checa. Operan desde vuelos domésticos a varios destinos internacionales de Europa y norte de África, con aviones regulares, charters y compañías low cost.
El aeropuerto está muy bien conectado. Podrás llegar a la ciudad con la
línea 76 de autobuses o en
taxi.
También puedes llegar a la ciudad en
ferrocarril. En la República checa, el tren tiene buenas conexiones con muchas ciudades europeas.
Una vez allí, lo mejor es que vayas
a pie para poder disfrutar del ambiente y observar los monumentos. Asimismo, puedes utilizar los
autobuses o los
taxis. Lo cierto es que no suelen tener unas tarifas demasido elevadas.
Qué ver y qué hacer
En el corazón de Brno encontrarás un magnífica casco antiguo. Así como pasa en otras ciudades europeas, es el lugar donde podrás encontrar la mayoría de las atracciones turísticas.El centro de la ciudad está limitado por la
Estación Central, la
Catedral, la
Fortaleza spilberk y la
plaza de Moravia (Moravské nám?stí), con centro
en la
Plaza de la Libertad (Svodoby Namestik).
Cuando viajes a Brno no puedes dejar de ver el
Antiguo Ayuntamiento, conocido como Stará radnice. Es el edificio más antigo de la villa. La
Galería Morava es otro de los puntos de interés que no puedes perderte. Este museo está considerado como el segundo más relevante de la República Checa. Tiene una colección muy amplia. Cerca encontrará la
Plaza Zelny, que desde la Edad Media ha acogido el Mercado de la Verdura. A su alrededor, podrás ver el
teatro Reduta, el más antiguo de Brno. En el extremo sur de la plaza, se encuentra el
palacio Dietrichstein (Ditrichsteinsky palac), qie alberga el
Museo Nacional Moravo (Moravské zemské), dedicado a la historia antigua
de Brno.
Algunos de los edificios más interesantes de la ciudad son la
Iglesia de San Juan o la Iglesia de San Pedro y Pablo, la primera iglesia construida en el siglo XII. Pero sin duda, la
Villa Tugendhat también guarda una gran importancia pues es la única muestra de la arquitectura funcionalista de la época de entre guerras y que fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Además, entre las curiosidades naturales de la ciudad se destaca el
Karst
Moravio. Tendrás la posibilidad de dar un paseo en bote por el río subterráneo y ver los lagos que guarda en su interior.
Eventos y fiestas típicas
La fiesta más recomendada en Brno es la Noche de Malabaristas. Tiene lugar en mayo y durante todo ese día el teatro callejero se apodera de la ciudad, convirtiéndola en algo mágico. Hay magos, malabaristas, payasos, fuegos artificiales... Otra de las fiestas más importantes es la de 9 de mayo, cuando se celebra el día de la liberación contra el fascismo.
Pero, sin duda, el más peculiar es el 3 de junio. Se celebra el día de la Nostalgia del Transporte. Toda la gente que quiere se sube a algunos de los transportes históricos que ya no se ven habitualmente como el tranvía a vapor o los vehículos de tracción animal.
De compras por
Si eres amante de ir de shopping, esta ciudad no va a decepcionarte. Tendrás una gran cantidad de tiendas y centros comerciales donde indagar. Por ejemplo,
Galerie Vankovska ofrece vestidos, calzado y perfumería. Es imposible salir de allí sin compras. POr otro lado, en el
centro comercial Olympia, podrás comprar algún recuerdo o detalle. Hay productos hechos a mano fantásticos.
En verano no debes perderte el mercadillo
Zelny trh. Encontrarás todos los productos gastronómicos típicos del lugar y hacer alguna que otra degustación de cerveza. También podrás probar dulces locales hechos por fábricas famosas.
Qué se cuece en
La cocina checa se basa sobre todo en alimentos que se cultivan en el país, en especial, cereales, legumbres, patatas y carnes. Si viajas a Brno no puedes perderte las bolas de masa de harina (
knedlíky), una rica selección de salsas y
sopas, el solomillo con salsa de crema de leche (
sví?ková na smetan?) o
el asado de cerdo con col rehogada y bolas de masa de harina (
vep?o
knedlo zelo).
La
cerveza está considerada como la bebida nacional.
Encontrarás hata 470 tipos diferentes de cervezas, auque las botellas de
Becherovka son el recuerdo favorito que se llevan los turistas de la República Checa.
El clima
Brno tiene un clima similar al del resto de la República Checa. Los inviernos son grises y bastante fríos, mientras que los veranos suelen ser suaves y soleados. Las precipitaciones tienden a acumularse durante la primavera y el verano. Por eso la temporada más agradable para viajar suele ser en otoño, además, hay menos turistas que en verano.
Datos prácticos
Los ciudadanos de la Unión Europea pueden entrar en el país sin
necesidad de visado.
El idioma oficial de Praga y del resto del país es el checo pero no
tendrás ningún problema para comunicarte en inglés e incluso en
castellano en ocasiones.
La moneda de la República Checa es la
corona checa. Podrás cambiarla en cualquier casa de cambio, pero es recomendable hacerlo en los bancos o cajeros automáticos porque las comisiones son menores.
Entonces...
Pasera por las calles de Brno es como descubrir un diamante en bruto. No es la capital, pero tienen muchos rincones preciosos por descubrir.