En la ciudad de Rio Branco, hay mucho que ver y hacer. Entre los edificios históricos más importantes se encuentran el Palacio Rio Branco, que narra la historia de la ciudad y tiene un gran valor político, cultural y arquitectónico.
En el Memorial de los Autonomistas podrás conocer la historia de la adquisición de Acre en Brasil y en el Museo de Goma, el período histórico del ciclo de la goma. Otros bienes públicos son la Catedral de Nossa Senhora de Nazareth, catedral en estilo romano que fascina por sus tres naves y coloridas vidrieras.
Para disfrutar del panorama de la ciudad, cruzar el iluminado la pasarela Joaquim Macedo, construido con la tecnología de cable de suspensión y pasa sobre el río Acre.
A los pies del río se encuentra el árbol histórico Gameleira con 2,5 metros de diámetro y 20 metros de altura y sin duda uno de los más bellos árboles en el país. Para pasear, visitar la arbolada plaza Plácido de Castro y el Parque da Maternidade, que ofrece muchas opciones de ocio, incluyendo: cortes, kioscos, restaurantes, bicicleta y patinando pistas de deportes.
Si buscas conocer la artesanía y productos típicos locales, vale la pena conocer el viejo mercado.