positivo:
Nada. La situación, pero no merece la pena en absoluto.
negativo:
Horrible, sucio y desagradable. No me considero delicado, ni exigente. He hecho muchos viajes por toda Europa, alojándome en muy diferentes hoteles, pensiones, hostales, albergues, y demás. Sin duda este ha sobrepasado a todos ellos en suciedad, falta de servicios e indiferencia por parte de la dirección. El primer día estuve llorando y a punto de irnos a otro, pero ya estaba pagado, y no había sido barato, así que decidimos aguantar.Detallando, las paredes parece que jamás han sido limpiadas, y mucho menos pintadas. Sobra decir con esto, la pésima o nula decoración de las habitaciones. Las moquetas de todo el edificio rezuman años de historia y de pisadas. Vamos, asquerosa.En recepción, un pequeño cuarto, aparte de lo que viene a ser una recepción medianamente cutre y bastante desordenada, es donde se desayuna (que aunque pone desayuno continental, no deja de ser autoservicio de pan de molde con mantequilla, mermelada, zumos de bote y leche), están los ordenadores, tienen las toallas y sábanas, friegan los cacharros del desayuno (en el mismo sitio donde tienen los papeles y atienden, tiene tela), y además duermen por las tardes (y quizás por las noches) en un colchón los recepcionistas.El primer día pagamos 5 libras por limpiar la habitación y cambiar las sábanas. O eso creíamos, porque al pasar el tiempo resulta que eso era por hacer la cama, tirar la papelera y cambiar las sábanas y toallas cada 3 días. Ni siquiera limpiaron el baño. Además había en la habitación (con lo pequeña que era y falta de mobiliario), y como detalle por parte del hotel una bandeja con una jarra sucia llena de agua y 2 tazas para tomar el té, cosa que por supuesto no hicimos. Al intentar dejarla en recepción para ganar espacio, el recepcionista se enfadó porque decía que eso era un servicio gratuito y que debía estar dentro de la habitación.El hotel (aunque no es tal) ni tan siquiera podría estar considerado un bed and breakfast, estaba regentado por paquistaníes. No tengo nada en contra de ellos, pero éstos eran sucios, con la misma ropa todos los días, al igual que la que recoge las habitaciones, si se puede llamar recoger a eso. Tuve que bajar a recepción cada día a pedir un rollo de papel higiénico ya que a la que cambia la papelera no se le ocurrió hacerlo.La tubería del fregadero del baño, el cual era un asco, tiene filtraciones y pone todo mojado. La alcachofa de la ducha no cierra bien y gotea toda la noche (y por el día también, imagino). Al ser las paredes muy finas, se oye todo, incluido el goteo.El armario consiste en una caja grande con una barra y 2 perchas, sin puerta ni nada, y sin cajones.Las ventanas no cierran bien, y no tiene persianas, haciendo que la luz entre por la mañana por todos lados. La terraza, bueno, el techo al que dan las ventanas, si puede llamarse así, está llena de muchas colillas, como si nunca la hubieran barrido.Para colmo, el último día salimos por Londres y me dijeron que si llegábamos más tarde de las doce tendríamos que pagar 5 libras más. Al preguntarle yo porqué, su respuesta fue una sonrisa.En dos ocasiones asistí a discusiones entre personas alojadas y los de la recepción, por muchos y diversos problemas. Naturalmente ellos pasaron olímpicamente. Comprenden perfectamente, pero se ven que les da =.Parece mentira que en Londres, una ciudad moderna que vive del turismo, dejen continuar un establecimiento como éste. También debería ser sacado de las páginas de hoteles. . En España o cualquier otro país medio civilizado, estaría ya cerrado por sanidad o por el Ministerio de Trabajo. Por mí lo quemaban o lo echaban abajo. Sin duda es una vergüenza, un sitio asqueroso, y falto de cualquier requerimiento mínimo, para el servicio a nadie.En resumen, es el peor hotel en el que he estado en mi vida, y en el que espero estar, ya que me extraña que exista algo peor.